lunes, 4 de abril de 2011

MURO

Un temor casi frío en la garganta
y un grito en la mirada. Congelado.
Detrás nada. Un muro desconchado
y un ciprés cuya sombra se agiganta.

Y un gris amanecer que se abrillanta
con un rayo de sol avergonzado,
y un Caín y un Abel que maniatado
mastica el corazón que le atraganta.

Y una orden brutal, como un ladrido
y una descarga cruel y fratricida
y un horizonte rojo repetido.

Y un hombre ya vacío en que trepida
la latitud terrible del olvido
donde la libertad cae abatida.

viernes, 24 de diciembre de 2010

POSTAL DE NAVIDAD

Deseo brindaros un canto de gloria
que hermane a las almas que siente amor,
que exalte la vida y destierre el dolor
y malos recuerdos en toda memoria.

Haced de la paz única victoria,
pensad como niños llenos de candor,
ganad con empeño un mundo mejor
y haced que se escriba una nueva historia.

Compartid la mesa y bebed conmigo,
brindad por aquellos que pueden soñar
y por todo aquel que tiene un amigo.

De las cosas nada se puede esperar,
vuestro corazón poned por testigo
oyendo su voz y podréis amar.

martes, 21 de diciembre de 2010

LAGUNA DE LAS YEGUAS

Eres espejo de la cumbre alpina
donde se peina el sol, y eres la cuna
en que sueña el reflejo de la luna
con la nana que el viento le amadrina.

Eres así la joya que ilumina
la agreste sierra que a la vez te acuna.
Eres mar y eres cielo eres, laguna,
palacio de la brisa aguamarina.

Leyenda de las yeguas de colores
que nacen de la muerte del hielo
galopando en tus bellos miradores

para ser la esperanza y el consuelo
de aquellos que perdieron sus favores
y aún hoy lloran por no ver tu cielo.

sábado, 18 de diciembre de 2010

A una mujer



Si fueras tú la luz, serias cometa,
si fueras una flor, serias la rosa
si pudieras volar la mariposa
o tal vez, por cruel, serías saeta.


También eres la musa del poeta,
enigma intemporal donde reposa
la clave universal, donde se posa
en cábala el arcano del profeta.


Puedes ser todo y me diste la vida.
Tras amarte quedó solo un vacío
amargo, cruel, rebelde y homicida.


Ausente tu, vivo el escalofrío
del estertor causado por la herida
abierta en la que sangra el amor mío.

                                                                        José Francisco